¿Cuestión de suerte? El salir victorioso en unas carreras, ganar un torneo de fútbol, participar en Juegos Olímpicos y llevarte una medalla no es cuestión de suerte. Quizá también haya entrado este factor pero la victoria se construye, con constancia, dedicación, entrega, amor y mucha pasión. Un ejemplo de ello, es el piloto mexicano Sergio Pérez quien nunca se ha rendido y ahora está triunfando en la Fórmula 1.

´Checo´ se proclamó campeón con su escudería Red Bull en el Gran Premio de Mónaco 2022 , el primer mexicano en hacerlo. De por sí ya había sido campeón en otras dos ocasiones, en 2020 y 2021 y sabe lo que se siente pero hacerlo en este circuito callejero es algo muy especial.
Estos triunfos no fueron por suerte, es el trabajo y el esfuerzo diario que hay detrás desde que empezó su carrera en el automovilismo en 2004 y posteriormente debutando en la F1 en 2011.
Un deportista de alto rendimiento como él, se ha preparado física y mentalmente a lo largo de su carrera para triunfar. Como todos se ha enfrentado a pruebas difíciles, a la competencia intensa, a los fracasos y a todas las dificultades pero gracias a su fortaleza mental está donde quiere estar y representa a todo un país es su especialidad.

El piloto está cosechando lo que ha sembrado, además de ganar, sigue sumando puntos, continúa siendo uno de los rivales a vencer en el circuito y por si fuera poco renovó su contrato hasta 2024, el tapatío negoció un aumento y recibirá 10 millones de euros anuales.

Lo que podemos admirar del ´Checo´, es lo mismo que lo que podemos aprender de él. Su capacidad para nunca rendirse, luchar por lo que quiere y además conseguirlo. Él lo hace por medio del deporte pero cada uno de nosotros desde nuestro ámbito lo podemos hacer. Empezar a cambiar pequeñas cosas de nuestra vida diaria que nos detienen ante el crecimiento, tenernos paciencia, apasionarnos más por lo que queremos construir y tener fe que siempre vamos a conseguir la victoria.